Estrés y un nuevo teleco
Hoy poca cosa puedo aportar a la blogosfera mundial, salvo que ha sido un día de mucho trabajo (y que no falte) y por lo tanto sin un hueco para surfear en busca de cosas interesantes.
Hoy mi tiempo lo ha ocupado, por este orden: una testamentaría, escribir varias cartas a clientes y compañeros (si, he dicho bien, cartas, no correos electrónicos), ir a Hacienda por un tema de un embargo de sueldo de un cliente, redactar un contrato de traspaso de local de negocio, y como colofón, a última hora me ha entrado en el despacho un divorcio. No el divorcio en si mismo, sino una señora que se quiere divorciar mucho de su marido. Que le vamos a hacer, los curas casan y nosotros divorciamos.
Como alternativa, podéis (yo ya lo he hecho) felicitar a Otis que ya es oficialmente desde hoy Ingeniero de Telecomunicaciones (si, esa carrera que queriamos hacer todos, pero luego no hizo nadie por que era muy difícil)
Hoy mi tiempo lo ha ocupado, por este orden: una testamentaría, escribir varias cartas a clientes y compañeros (si, he dicho bien, cartas, no correos electrónicos), ir a Hacienda por un tema de un embargo de sueldo de un cliente, redactar un contrato de traspaso de local de negocio, y como colofón, a última hora me ha entrado en el despacho un divorcio. No el divorcio en si mismo, sino una señora que se quiere divorciar mucho de su marido. Que le vamos a hacer, los curas casan y nosotros divorciamos.
Como alternativa, podéis (yo ya lo he hecho) felicitar a Otis que ya es oficialmente desde hoy Ingeniero de Telecomunicaciones (si, esa carrera que queriamos hacer todos, pero luego no hizo nadie por que era muy difícil)
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Otis B. Driftwood -