Blogia
A veces pienso...

Cara de cemento

Cara de cemento Recibo ayer una llamada de, supuestamente, la ONG Cooperación Internacional. El asunto es que según me comenta una voz cansina de telefonista, tienen urgente necesidad de enviar insulina a Argentina y están realizando una promoción entre profesionales para obtener colaboración. La colaboración consiste en comprar unos lotes de material de oficina.

Uno que esta de vuelta en estas lides, informa a la telefonista que no. No hago compras por teléfono ni donaciones a organizaciones que no se identifiquen plenamente. Envieme usted por fax los datos de su ONG y luego me llama.

La telefonista me envía presurosa un folio en blanco, sin membrete, con la descripción y contenido de dos lotes de papelería y su precio.

Vuelve a llamarme.

No, lo que le he pedido es información sobre la ONG y su labor, no los precios de lo que usted vende.

Hoy sobre las 14:00 me llega un fax con un texto idílico que describe la actividad de la ONG y la dirección y datos de esta. El membrete es doble, de la ONG y de una empresa de papelería. La empresa esta radicada en Murcia (vaya... con la iglesia hemos topado... PHN y todo eso), la ONG en Madrid.

Llamo a la ONG. Se muestran muy interesados en obtener una copia del fax recibido. Lo envío. Me vuelven a llamar y me dicen que, si bien la empresa colabora con ellos ocasionalmente a través de donaciones, no tienen autorización para vender en su nombre y menos citando los fines altruistas que persiguen. Van a investigar el asunto y me agradecen el interés que me he tomado.

Estoy harto de jetas, de pequeños jetas y de grandes jetas. Pequeños jetas como este y grandes jetas como Wanadoo que para pedir una factura te indican que debes de llamar a facturación al 807 XXX XXX.

Dios, que harto estoy

La ONG Cooperación Internacional

La empresa de papelería Ilorciplast

Actualización: media hora después

Me llaman de la ONG. Matizando.

a) Es cierto que tienen un convenio con nosotros, y que dan un porcentaje de sus ventas.

b) Pero no pueden llamar en nuestro nombre ni identificarse como ONG.

c) Tan sólo están autorizados a enviar un escrito tipo nuestro con la factura, para que comprueben la realidad de la donación, pero a nada más, y nunca antes de la factura.

d) Hoy hemos recibido tres llamadas como la suya, y el convenio es de hace un año, en este tiempo no hemos recibido ninguna queja.

e) Parece ser que en el "call center" hay alguna telefonista nueva y no plantea el asunto correctamente.

f) No están enviando insulina a Argentina.

Dos minutos después me llama la ya entrañable telefonista.

- Hable usted con cooperación internacional, al parecer no estan actuando correctamente segun me indican -me contengo-

-¿Cómo que no estamos actuando correctamente?

- Insisto señorita, hable con ellos.

- ¿Pero que quiere usted decir?

- Señorita, tengo una llamada por la otra línea (era verdad)

¿Las telefonistas van a comisión? A lo mejor la jeta era ella.

Actualización: cuarenta y cinco minutos después

Me llama el propietario de la empresa de papelería. Correcto y educado. Apenas le entiendo, tiene un acento murciano muy cerrado.

La conversación es larga.

Conclusiones: afirma que su empresa es legal, pero que hay alguna chica nueva que no plantea bien el asunto. Ya no hay necesidad de insulina en Argentina, ahora la necesidad es construir unas casas en, en... no lo recuerda exactamente. Ha hablado con todas las telefonistas del turno y mañana lo hará con las del turno de mañana. Su empresa es legal y no quiere que se le entienda mal.

Pues ahí queda eso, amigo.

0 comentarios