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A veces pienso...

El primer español del año

El primer español del año En estos días atrás, la prensa de mi ciudad, Zaragoza, ha tratado profusamente el tema del primer español del año 2004.

Como es tradicional en la prensa, el día dos de enero se publicaron las fotos y los detalles de los alumbramientos de los tres primeros infantes del año 2004 en cada una de las provincias de la Comunidad Autónoma. El primero de ellos, nacido en Zaragoza, y al, parecer de España, era el hijo de una mujer rumana. Cuando lo leí reflexioné sobre que gracias a hombres y mujeres como ese pequeño la vieja Europa va a salir adelante, por que los autóctonos, por diversos motivos, no nos reproducimos lo suficiente.

La historia terminaría con esa foto y reseña en prensa si no fuera por dos detalles.

La madre (el padre no es conocido) del primer español del año, llamado Aronas, rechazó sospechosamente cualquier ayuda desinteresada que los servicios sociales le pudieran ofrecer para el mantenimiento de su hijo recién nacido.

Si a esto unimos que apenas una semana después la madre y el niño fueron vistos mendigando por el centro de la ciudad, se genero el caldo de cultivo para lo que jurídicamente se denomina “alarma social”.

La prensa de la ciudad llamó a los servicios sociales de la Diputación y a la Policía para preguntar las medidas que se iban a tomar en el asunto.

Al día siguiente, uno de los diarios de la capital, anunciaba en portada, con gran despliegue tipográfico que la policía buscaba a Lamitta (asi se llama la madre) y a su hijo.

Ocurrió lo inevitable, a los pocos días la policía localizó a la madre y entregó al niño a los servicios sociales. Lamitta mendiga ahora sin el reclamo de su hijo y se lamenta por su pérdida. Incluso este domingo la entrevistaban improvisadamente en la prensa.

Al parecer, detrás de Lamitta y otras mucha mujeres y hombres de su nacionalidad hay, como no, mafias rumanas que controlan la mendicidad, la prostitución, e incluso el trabajo irregular en el sector de la construcción.

Esta es la intensa historia del primer español del año.

Pero, ¿y el octavo, el vigésimo primero o el que nazca en agosto, en octubre o en diciembre?

Realmente, mujeres que mendigan con bebés en brazos hace tiempo que se ven mucho por el centro de la ciudad.

Entonces, ¿habría intervenido el estado con tanta contundencia si el hijo de Lamitta no hubiera sido el primer español del año?

Dejo la respuesta a la conciencia de cada uno.

Más aquí , aquí , aquí , y aquí

1 comentario

Danuto -

Subrayaría todo lo que has puesto, pero desde aquí no puedo. Así que considéralo subrayado, jefe.